Las celdas caloríficas del Parche Térmico Terapéutico Hansaplast contienen componentes naturales, como polvo de hierro, sal y carbón. Cuando se abre la bolsa, el hierro reacciona con el oxígeno del aire y se liberan energía y calor moderado. La sal y el carbón actúan como moduladores y aceleran la reacción química. Cuando el parche autoadhesivo se aplica en la piel, la sensación de calor aparece en el curso de 30 minutos. El efecto de calentamiento dura 8 horas a una temperatura constante de unos 40°C.
Tecnología.
¿Cómo ayuda?
Estimula el flujo sanguíneo: El calor incrementa el flujo sanguíneo por dilatación de los vasos sanguíneos. Esto incrementa el transporte de oxígeno y nutrientes vitales a las células del tejido muscular, un primer paso en el proceso autocurativo.
Aumenta la eliminación de productos secundarios metabólicos: El material de desecho generado en los tejidos celulares y los músculos es reabsorbe más fácilmente por el flujo sanguíneo incrementado.
Alivia el dolor: El calor reduce la tensión, calma y relaja, y también incrementa la movilidad.
Causas del dolor.
La distensión muscular y la tensión que causan dolor en el cuello y en los hombros o dolor lumbar son las causas más corrientes de dolor. Los hábitos de vida modernos, como la postura monótona en el trabajo de oficina, la práctica escasa o inconstante de ejercicio y la obesidad, incrementan la incidencia de dolor muscular y dolor de espalda.
¿Cómo se percibe esta situación?
La disminución del flujo sanguíneo en el tejido muscular tirante da lugar a un suministro reducido de oxígeno y nutrientes y a un aumento de productos secundarios metabólicos. Esta situación estimula las neuronas, que envían mensajes a la médula espinal y, subsiguientemente, al cerebro. Después de su percepción en el cerebro, el dolor da lugar a diversas reacciones físicas, como contracción muscular, que empeoran el dolor.