El dolor de muñeca puede tener distintos orígenes. El deporte o el estrés en la vida cotidiana (por ejemplo, el trabajo diario en un escritorio) son algunas de las causas más comunes; las lesiones en los músculos, ligamentos, tendones y huesos, así como distintas enfermedades, también pueden desencadenar dolor en esta articulación. Afortunadamente, existen algunas medidas sencillas que los afectados pueden tomar por sí mismos para aliviar e influir positivamente en las restricciones de movimiento y el dolor en la muñeca.
¿Cuáles son las causas del dolor de muñeca?

El dolor de muñeca puede tener diversas causas, y estas son las más más comunes:
- Uso excesivo o mala postura, por ejemplo, durante el deporte o en el trabajo.
- Tendinitis
- Síndrome del túnel carpiano
- Lesiones en tendones y ligamentos
- Fracturas óseas, esguinces o contusiones
- Movilidad excesiva de la muñeca
- Cambios degenerativos en la muñeca
Una causa común del dolor de muñeca es su sobrecarga durante la práctica de deporte. El entrenamiento excesivo, la ejecución incorrecta o las malas posturas pueden dañar los ligamentos y tendones, haciendo que los pacientes experimenten dolor en la muñeca al moverse o apoyarse. Un escenario habitual de dolor de muñeca inducida por el deporte es la sobrecarga durante las flexiones: los principiantes, en particular, pueden experimentarlo cuando se apoyan, debido a una tensión a la que no está acostumbrada.
Los esguinces o contusiones son otras lesiones deportivas típicas que se pueden tratar por sí mismas con la ayuda de una muñequera protectora o cintas kinesiológicas. Para un dolor de muñeca persistente o lesiones agudas como un esguince o una posible fractura, siempre debes consultar a un médico.
Consejos para combatir el dolor de muñeca
Con estos tres sencillos consejos contra el dolor de muñeca, puedes aliviar las molestias tú mismo y ayudar a la articulación en el proceso de curación. De este modo, podrás reducir o evitar la repetición del dolor.
¿Cómo prevenir el dolor de muñeca?
En varios deportes, la sobrecarga de los músculos y tendones (y, por tanto, también el dolor de muñeca) se puede prevenir de una forma sencilla. Medidas preventivas, como llevar una muñequera, pueden mitigar las tensiones bruscas, como las que ocurren a menudo en los deportes de pelota. Calentar antes y hacer estiramientos musculares después del deporte, también puede ayudar a prevenir el dolor y las lesiones de la muñeca.
Si estás empezando a hacer deporte o presentas síntomas de dolor en la muñeca durante la práctica, puedes reducirlos utilizando una muñequera protectora. Los deportes y el ejercicio regular promueven que las estructuras de nuestro cuerpo, como músculos, tendones o ligamientos, estén más sanos y resistentes; también conducen a un mayor equilibrio y bienestar psicológico. Por lo tanto, los efectos positivos de la actividad física no pueden ser descartados de ninguna manera.

Revisión por expertos: Dr. Michael Richter
El Dr. Michael Richter es un fisioterapeuta certificado desde 1999 y trabaja en el renombrado "Rückenzentrum Am Michel" en Hamburgo, Alemania, un centro interdisciplinario especializado en el tratamiento de personas con molestias musculoesqueléticas agudas y crónicas.
Es un experto en terapia manual y terapia mediante ejercicios, y ha estado trabando con personas con problemas de espalda y articulaciones durante 20 años. Además de su entusiasmo en el tratamiento manual de los pacientes, la educación sobre el dolor está muy cerca del corazón de Michael, y su ambición durante años ha sido informar a pacientes y colegas con los mejores datos (cientifícamente sólidos) sobre el área del dolor.
Además de su trabajo práctico con pacientes, Michael está involucrado en la enseñanza y la investigación, como profesor sustituto en el campo de la fisioterapia, en la Münster School of Health en Münster, Alemania.
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Si existe una lesión grave, debe ser evaluada y tratada por un médico especialista. Si no estás seguro de la causa del dolor, también debes consultar a un médico. Si los síntomas se acompañan de enrojecimiento, hinchazón, sobrecalentamiento de las articulaciones, dolor severo o persistente y/o síntomas neurológicos (p.e. entumecimiento, hormigueo) o si el dolor irradia a las piernas, debes consultar a un médico inmediatamente. La información en esta web no pretende ser una base para el autodiagnóstico, tratamiento o medicación.
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